Para justificar estas detenciones las autoridades argumentaron que no se podían realizar actividades periodísticas porque todas las poblaciones estaban bajo estado de emergencia y que se requería una autorización especial. El 4 de octubre pasado el presidente Raúl Castro declaró el estado de emergencia. No obstante, la ley estipula que el estado de emergencia debe ser declarado mediante una resolución que exprese las causas que la originan, la delimitación del territorio donde se establece y el plazo de vigencia. Hasta el momento, no existe ninguna resolución oficial al respecto.

En Cuba no faltan los temas tabú, que se prohíbe tratar a los medios de comunicación no autorizados. El 31 de agosto pasado Reinaldo Escobar, periodista del sitio web 14ymedio no pudo cubrir la inauguración del primer vuelo regular entre Estados Unidos y Cuba. Lo detuvieron en Santa Clara y lo llevaron a La Habana por la fuerza, acusado de hacer “periodismo enemigo”. El 18 de agosto de 2016 Oscar Sánchez Madan, reportero de la agencia Hablemos Press, fue detenido por tres agentes de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) en el municipio de Cárdenas, cuando entrevistaba a Leticia Ramos Herrería, representante del movimiento Las Damas de Blanco, formado por esposas de opositores políticos encarcelados.

"Reporteros sin Fronteras deplora la creciente hostilidad del gobierno cubano frente a la prensa independiente del país”, señaló Emmanuel Colombié, responsable del Despacho América Latina de RSF. “Las recientes maniobras de las autoridades para censurar a los medios de comunicación ‘no oficiales’, en un contexto de catástrofe natural, son totalmente improductivas y refuerzan el clima de autocensura, perjudicial para todo el país. El gobierno cubano debe ir más allá de sus posturas ideológicas y, en lugar de oponerse sistemáticamente a la prensa independiente, debe acompañar su desarrollo”, añadió.

Los casos de hostigamiento se han multiplicado en estos últimos meses, haciendo imposible el trabajo de la prensa independiente. A finales de septiembre de 2016 RSF tuvo conocimiento de que varios miembros de Hablemos Press se exiliaron. El director de la agencia, Roberto Jesús Guerra Pérez; el vicedirector, Eduardo Herrera; la directora ejecutiva, Magalay Otero Suárez, y el reportero Arian Guerra, no tuvieron otra opción que dejar Cuba, tras recibir repetidas amenazas. La agencia Hablemos Press padece acoso, represión y detenciones arbitrarias desde hace trece años. Roberto Jesús Guerra Pérez dijo a RSF que había sufrido la presión permanente del gobierno las últimas semanas: intimidaciones de funcionarios en la calle, lo obligaban a suspender su trabajo, incluso recibió amenazas de muerte en su teléfono. Ahora en el exilio, teme que en las próximas semanas se lleve a cabo un allanamiento ilegal en la sede de la agencia.

Eso fue lo que le ocurrió a la ONG Cubalex (Centro de Información Legal), que defiende la libertad de prensa. El 13 de octubre pasado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión publicaron un comunicado de prensa en el que expresaban su preocupación por la persistencia de actos de hostigamiento del gobierno cubano: allanamiento de las oficinas de la ONG, corte de las líneas telefónicas, interrogatorios, revisiones humillantes. Estos actos de presión ocurrieron después de que se presentó ante las Naciones Unidas un informe realizado por Cubalex sobre la situación de la libertad de Expresión en Cuba.

En septiembre pasado el sitio web 14ymedio, fundado por Yoani Sánchez (heroína de la libertad de prensa 2014 de RSF), reveló que el gobierno cubano, a través de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa), implementó un filtro que impide que ciertas palabras circulen a través de la red celular, de esta manera bloquea el envío de SMS que tengan términos y frases claves como "derechos humanos”, “huelga de hambre”, el nombre de la revista de oposición Convivencia, así como los nombres de ciertos opositores políticos.

La lista de sitios web informativos bloqueados o que han sufrido ciberataques –como Cubaencuentro y Martinoticias– creció en 2016.

Cuba es el último país de América Latina en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras. En 2016 ocupa el lugar 171, entre 180 países.